Curso: HISTORIA Y ANTROPOLOGÍA URBANA 2014
Tema 3: ETNOGRAFÍAS URBANAS CONTEMPORÁNEAS Y REFLEXIONES "CULTURALES" EN TORNO AL ESPACIO URBANO.
Sesión 12. Ciudad y visualidad.La centralidad del consumo en la vida urbana contemopránea es un fenómeno sintomático de la relación entre procesos macro y micro sociales: el sistema de producción y circulación de mercancías va acompañado de sistema simbólico que modela el deseo y la subjetividad. A través de dar seguimiento a los objetos (mercancías) se puede conocer la vida de las personas que les dan sentido, así es posible concoer las dinámicas de la vida urbana a través de una etnografía de las cosas.
El texto de Beatriz Sarlo “La Ciudad Vista: mercancías y cultura urbana”, en especial los capítulos referentes al Centro Comercial y a la Cyber-Ciudad establecen una relación muy estrecha con el concepto de no-lugar formulado por Marc Augé y a partir del cual se pueden pensar los espacios de no interacción, en los que se reproducen discursos y prácticas de exclusión presentes en la ciudad “real”; sin embargo valdría la pena preguntarse, sobretodo, si la cyber-ciudad en realidad da cuenta de un aislamiento o una fragmentación social o si puede constituirse en un espacio estratégico que convoque la reocupación de espacios físicos y de movilización por reivindicaciones sociales.
ResponderEliminarBeatriz Sarlo propone que “la economía visual del capitalismo moderno ha levantado nuevas barreras ante la experiencia compleja en las calles de la ciudad”. Se ve así que el shopping efectivamente reemplaza una parte de la ciudad y de esta forma atenúa o definitivamente desaparece lo que caracterizó lo “urbano” creando paisajes ‘comunitario’ homogeneizados, utopías del capitalismo tardío que se oponen a la entropía, posibilidades de ensoñación que consume al hombre mediante la regularidad y la instauración de las lógicas de vigilancia.
ResponderEliminarEntre el shopping como culmen de la era del capitalismo global y expansivo y la proliferación de las ventas ambulantes, ¿cuál es el espacio para la singularidad y la expresión individual? ¿no se convierten también las lógicas de comercio marginales en parte del potlach en lugar de espacios para la resistencia?
La autora plantea también que el shopping ofrece valores sólo se obtienen parcialmente fuera de los enclaves del capitalismo globalizado, pero a la vez
establece variaciones de emplazamiento social, ya que nadie es igual en el mercado y el shopping, aunque se percibe como un espacio abierto e inclusivo, es en realidad el reflejo de diversos niveles de exclusión. Entonces, si aceptamos que el análisis de la ciudad debe reconocer el carácter previo de esta configuración que es tanto económica como cultural, ¿hacia dónde se dirigen las lógicas urbanas hegemónicas si sumamos la cultura del consumo con las políticas de vigilancia y regularización de lo “otro marginal” dentro de contextos que llevan una fuerte carga de violencia simbólica?
Finalmente, de acuerdo con la segunda parte del texto de Sarlo, se analiza el proceso de pgentrificación y la reapropiación de los espacios urbanos mediante la generación de sitios icónicos, que a fuerza de repetición se transforman de pequeños refugios en donde confluyen imaginariamente pasado y presente en no-lugares, carentes de autenticidad y reducidos a las lógicas comerciales del capitalismo globalizado. En este sentido, ¿podría definirse al nuevo espíritu urbano como un resultado del triunfo del comercio y el capital, que terminan imponiendo un espíritu repetitivo, panóptico y antientrópico?
Beatriz Sarlo
ResponderEliminarMe interesa del texto sobre todo como se habla del consumo y su relación con la mirada, cuando la autora habla del shopping y de la existencia de mercancías menores, "Como una prótesis compensatoria del resentimiento de quienes no pueden adquirir sino lo más barato”, pero el hecho de comprar estos objetos minúsculos podría también ser entendido más bien como una herramienta para parecerse o llegar a ser una persona que puede comprar, más no por conformarse? No es solo el hecho de adquirir lo más barato sino tener la capacidad de comprar algo para estar al nivel de quien puede comprar otro tipo de objetos en el shopping.
A su vez me resulta problemático como el shopping como espacio de homogenización, de reglamentación y de orden puede servir o convertirse en espacios que sirven para ejercer discriminación y exclusión sobre ciertos grupos que no se ajustan no lo establecido, pienso en como varios centros comerciales de Guayaquil principalmente, restringen el ingreso por ejemplo de personas con diversidades sexo-genéricas, únicamente por la apariencia física más no por la mayor o menor capacidad adquisitiva que pueda tener.
Retomaré del texto la parte que a mi juicio resulta sumamente interesante, me refiero al análisis que hace la autora de los Shopping Center como nuevos núcleos urbanos que de alguna manera suplantan las funciones de la cuidad.
ResponderEliminarEn una parte del texto la autora argumenta que algunos arquitectos se han vuelto famosos por la construcción y/o diseño del Shopping Center y el Parque Temático y esboza la tendencia a considerar estas construcciones como “no arquitectura”. Mi pregunta es la siguiente: ¿Por qué este tipo de modelo arquitectónico es considerado como tal?
Según lo que dice la autora el Shopping Center asume, mejora y perfecciona las características de la cuidad en un environment artificial creado para ello. Pregunto: ¿Puede considerarse este espacio como una estructura social aglutinadora, capaz de sustituir definitivamente al tradicional espacio público (parques y otros) como sitio de socialización?
En el texto se habla de la relación Shopping Center – Mercancía –Cliente. La autora plantea que el primero es un espacio imaginariamente inclusivo, por el acceso visual que los consumidores tienen por igual a la mercancía… Me parece que más bien este es un espacio que genera una gran segregación cultural y/o económica, que no implica sólo a la mercancía como estratificador (según dice Sarlo), sino que articula otros mecanismos de segregatorios simbólicos como el deseo frustrado de la comitencia que circula en su interior pero no puede pagar por la mercancía.
En algún momento del artículo se habla de que los Shopping Mall constituyen limpieza al vacío, creo entender que se refiere a la condición del espacio interno de estos lugares, sin embargo en mi opinión estos conglomerados constituyen un abigarramiento indiscriminado de cosas listas para ser consumidas o mejor dicho para conjugar la ilusión de consumo con el deseo de consumir.
Según Beatriz Sarlo el Shopping Center reproduce lo que se espera de una ciudad… orden, limpieza, claridad, seguridad et al. Luego argumenta que da la ilusión de independizarse por completo de la urbe constituyéndose en un núcleo desconectado de la misma. Pregunto ¿Hasta qué punto el Shopping Center como ente es independiente del mecanismo cotidiano de la dinámica urbana? ¡Hasta qué punto los ciudadanos están seguros en el Shopping Center y hasta qué punto esta seguridad no es una ilusión creada por el mecanismo del mercado para atraer al cliente?
El texto de Sarlo, me ayuda a comprender todo lo que conlleva la apertura del shopping en la ciudad, me llamó mucho la atención el hecho de crear toda esa fantasía del consumidor sin importar, si éste puede comprar o no ; es interesante como en el shopping se maneja un orden infalible circunscrito en la cotidianidad con la excepción de la rotación en las vitrinas de los productos que varían para incrementar la ilusión que muy pocas veces está al alcance de quién los mira; por otro lado la descripción de los vendedores informales que se contraponen al orden del shopping, vendedores representantes de la ciudad en donde se encuentra con el desorden , descontrol e inseguridad; ofertando productos estrictamente dirigido para los “pobres”; en torno a los descrito por la autora me surgen varias interrogantes la primera es sobre el shopping y su aparente acogida, al manejar normativas internas el ingreso y la buena atención es exclusiva a un sector alto y medio alto de la sociedad. Sin embargo es posible la instauración de una nueva dinámica y normativas en ciudades como Riobamba; hace aproximadamente dos años se inauguró el “Paseo Shopping cadena del grupo el rosado”; si bien la ciudad reconocida por su agresión racial hacia los indígenas, en la cotidianidad se refleja cómo ésta agresión también se configura en el Shopping y su atención hacia los indígenas, presencie una disputa entre un empleado y un familiar del actual prefecto de la ciudad; su parentesco y el innegable poder del prefecto obligó al empleado que por cierto de muy mala gana a disculparse, que sucede en éstos espacios, estarían acorde a la descripción de Sarlo?. Toda la fantasía creada por el shopping invisibiliza la real situación que se maneja a su interior, un ejemplo tal como la situación de sus empleados, en los supermercados como mi comisariato , se produce una sobreexplotación del trabajador, se manejan estrategias para evitar una dependencia de trabajo entre el empleador y el empleado, sus contratos de medio tiempo logran esquivar ciertos beneficios de ley que los favorecería; sin embargo los empresarios buscan maneras alternas para evitarse dependencias que por supuesto afectan a sus empleados.
ResponderEliminarSe podría decir que los relatos etnográficos de Serlo tienen mucho de la cualidad que la misma autora resalta del escritor argentino Roberto Arlt: una mirada crítica y ácida sin caer en lo nostálgico y melancólico de las "costumbres" del pasado. Así, sus descripciones del shonpping y los vendedores ambulantes representan de cierta forma la vida urbana. El shopping queda retratado como ese sueño cumplido de una ciudad ordenada, limpia, clara y segura de la ciudad, pero también como ese espacio de control y reproducción de una forma hegemónica cultural de consumo, guiado por la mercancía y el nuevo "régimen óptico". Tal vez, una de las preguntas que me suscita el texto es: si el shopping es una suerte de "hegemonía cultural", donde hay no solamente una acumulación material sino también una "educación del gusto", entonces dónde está la contrapartida, o lo contencioso -en términos de Roseberry? ¿Existirá alguna forma de apropiación de ese espacio público-privado?
ResponderEliminarEl texto de Sarlo me provoca las siguientes inquietudes a partir del ejercicio de la etnografía.
ResponderEliminarCómo entender el mercado transaccional que está atravesado por la mercadotecnia y los diferentes estrategias para crear supuestas necesidades en los usuarios. Se debe crear una antropología del marketing o la hay? Y de haberla esta debería considerar las relaciones culturales y de consumo a las que el mercado de consumo visibiliza? Ciertamente cuando hacemos etnografía, sospecho que existe una parte de nosotros que imagina la ciudad o lo que de ella miremos. En este sentido, hasta que punto la transparencia de los etnógraf@s frente al objeto de estudio pasa por esa proceso de imaginación en la que provocamos otras imágenes mentales en los lectores que consumimos dichos estudios y cual sería el objetivo en la praxis social y de uso de dichas etnografías? Sería interesante tratarlo en la sesión de hoy.
Si una ciudad configura una identidad para mostrar de sí, cual es la identidad que intenta mostrar Quito en la actualidad?
ResponderEliminarLa descripción que realiza Sarlo sobre los shoppings se asemeja a los condominios habitacionales, descritos por Pires, principalmente en lo comunal ¿de qué manera se presenta a la comunidad como fuera de lo urbano?
¿Cuál es el lugar de los organismos estatales en la construcción de la identidad de una ciudad? ¿El borramiento de su actuación puede ser entendida como parte de esta disolución entro lo publico y lo privado propio de las ciudades virturales (o ciber-ciudades)?
http://www.lanacion.com.ar/1408462-faena-art-center-el-nuevo-vecino-de-puerto-madero
Teniendo en cuenta el texto, los espacios públicos que hacen parte de los shoppings son gestionados por manos privadas de igual manera se presenta de forma paralela que el espacio público hace parte de los mercados informales, en este sentido ¿cómo se puede entender el espacio público? ¿existen diferentes tipos de espacio público? adicionalmente también vemos que quienes gestionan y planifican los shoppings realizan cierto tipo de control de la corporalidad, visualidad y formas de relacionarse socialmente; en términos Foucaultianos, ¿sería este un tipo de biopoder gestionado por mentes e intereses particulares?
ResponderEliminarEl texto de Sarlo me genera una inquietud a propósito de la vida urbana como un espacio lleno de lógicas de consumo que proponen formas de entender y apropiarse de la ciudad. La capacidad de adquisición como una “identidad ideal” de lo que un citadino debe aspirar a ser, pensar y sentir; es la norma del ideal de habitantes que pueden acceder a objetos y comodidades que esta ciudad “ideal” les puede brindar.
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