Tema 3. Del gueto clásico a la marginalidad avanzada.
Sesión 7. "Marginalidad avanzada": síntoma de la ciudad post-industrial
Si bien las codiciones de vida precarias de las poblaciones empobrecidas han sido una constante a partir de la urbanización del siglo XIX, es claro que el proceso de "desindustrialización" ha significado cambios profundos en la vida urbana. La economía urbana basada en el sector terciario, la precarización masiva del empleo, las mayores expectativas creadas por el consumo son elementos caracterizan a las ciudades contemporáneas. La noción de "marginalidad avanzada" propuesta por Wacquant hace referencia precisamente a las formas de concentración espacial de las poblaciones más fuertemente golpeadas por el el déficit crónico de empleo y la retirada del Estado de Bienestar. Nuevamente el paisaje urbano a su manera revela este entramado de procesos complejos.
Quizá la características más interesante mencionada por Wacquant es la identificación de modelos distintos de marginalidad, los cuales se explican como el legado de diferentes historias urbanas. Al entender este fenómeno podemos establecer el origen de los niveles de tugurización y violencia que se producen en los guetos estadounidenses, en las favelas brasileñas,en las villas argentinas, etc. Lugares en donde la exclusión, además de tener una raíz socioeconómica, se fundamenta en ideas como la exclusión territorial o racial. Esta nueva marginalidad nos obliga,como antropólogos, a buscar sus dimensiones y orígenes específicos para así establecer respuestas efectivas. Una antropología participante como la propuesta por Nancy Scheper, quien por más de 20 años ha combatido desde el activismo la violencia y exclusión en la sociedad nordestina brasileña.
ResponderEliminarFinalmente me pregunto ¿qué características adquiere la marginalidad en ciudades andinas como Quito, y si se han aplicado esfuerzos efectivos para entenderla y combatirla? ¿el Estado construye marginalidad o la combate?
Una importante diferencia entre el texto de Wacquant y Bourgois es que este último hace mayor énfasis en la responsabilidad de la Antropología en la marginalización de ciertas comunidades. Wacquant más bien coloca sobre la mesa las contradicciones que se dan en el "desarrollo económico de occidente", donde el aparente desarrollo marginaliza más a los habitantes de la inner city. En este marco llama mi atención cierto fenómeno que se da en las pandillas, que es justamente resaltar a su comunidad por los mismos razgos que es descalificado. A diferencia de lo que indica Wacquant me parece que en el trabajo de campo se ve más bien una apropiación terrotirialista de la inner city. ¿Qué podríamos leer de este fenómeno? En su contexto Wacquant observa este desapego del sujeto con el lugar que habita, pero qué podría decirse en cambio de este profundo apego en cierto tipo de grupos, como los adolescentes. En mi punto de vista existe en nuestro medio una necesidad identitaria, en ciertos grupos, que no demora en constituir sus referentes.Creo que es importante reflexionar que estos fenómenos de los que da cuenta el autor son sobre todo de inmigrantes, aun así la necesidad de arraigo es independiente del origen. Si es que los habitantes del gueto en las ciudades post indtsrializadas presentan estos fenómenos cabría proeguntarse cuáles son sus referentes de identidad. Un sujeto sin espejo es un sujeto sin rostro
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ResponderEliminarEL estudio comparativo de Loïc Wacquant, específicamente el capítulo 8. El advenimiento de la marginalidad avanzada: características e implicaciones, da cuenta de un fenómeno de marginalidad en las grandes metrópolis, que se torna cada vez más, inserto en la dinámica de la contemporaneidad, de ahí su catalogación de avanzada en tanto se nutre de nuevos condicionamientos en la propia cotidianidad de nuestras sociedades. El autor parte de dos casos de análisis en EUA y Francia respectivamente, para el primero el Cinturón Negro de Chicago y para el segundo el Cinturón Rojo de París (estos con características propias en cuanto a devenir histórico, mercado e impronta estatal) para entrar en el análisis de una dualización de la ciudad que refuerza las distancias entre una y otra clase, una y otra etnia.
ResponderEliminarLuego del análisis de aquellos puntos que determinan el régimen de la marginalidad avanzada (el salario como vector de la inestabilidad e inseguridad social, la desconexión con las tendencias macroeconómicas, la estigmación de territorios, la alienación espacial etc.); Wacquant propone políticas y “soluciones” para combatir este escenario de precarización. Entre ellas:
- Buscar respuesta en otros espacios que no sean necesariamente la vuelta de los pobres al mercado laboral.
- Que las políticas sociales transgredan la mera frontera de la cuestión salarial.
- Involucrar y convocar al Estado a que distribuya equitativamente los bienes públicos en los diferentes espacios urbanos.
- Hacer que el Estado genere un subsidio universal a los ciudadanos.
Ante estos apuntes, me cuestiono hasta qué punto muchas de estas propuestas reconstructoras de Wacquant pudieran caer en el terreno de las utopías. Siguiendo sus preocupaciones sobre el compromiso intelectual y político que tenemos aquellos vinculados a los estudios sociales y antropológicos, sería interesante trazar una mirada crítica sobre el impacto práctico que tienen los estudios desde la academia en la implementación de políticas que modifiquen problemáticas de esta naturaleza. Pudiéramos pensar en la propia experiencia de FLACSO y el contexto latinoamericano.
Tanto el análisis teórico de Wacquant como el trabajo etnográfico de Bourgois se hacen cargo de aquellas ciudades correspondiente al "primer mundo", ciudades pioneras en lo que respecta a procesos de urbanización e industrialización. El capitalismo como modelo organizativo de la sociedad en sus distintas dimensiones ha mutado, y con ello, las ciudades y las dinámicas urbanas donde éste se ha plasmado. De ahí que Wacquant proponga la teorización de la "marginalidad avanzada", donde se puede evidenciar de manera crítica como el modelo económico ha reorganizado las formas de habitar en la ciudad, centrando su propuesta, en los efectos que esto tiene en los guetos y periferias de la ciudad, como en el abandono estatal hacia estos asentamientos, la fragmentación socio-espacial y la pérdida de identidad hacia el lugar y la falta de un sentido de pertenencia de los “condenados” de la urbe.
ResponderEliminarPor su parte en la investigación que llevo a cabo Bourgois es posible visualizar como la etnografía puede operar en aquel espacio conflictivo que es la ciudad para la disciplina. Un trabajo de años en donde el autor busca ahondar en la economía subterránea de una de las ciudades modelo del capitalismo como lo es Nueva York. En sus notas de campo vemos como opera esta economía, a sus interlocutores, sus andares cotidianos como sus motivaciones. Su contraste con la economía legal, y el por qué los inmigrantes de aquella inner city continúan sosteniendo dichas prácticas. Un proceso complejo que no es reducible únicamente a la venta de crack.
Qué posibles salidas son factibles en escenarios despojados como los descritos por los autores? Es la intervención estatal asistencialista o una mejora en la redistribución de la riqueza, o el empoderamiento de la comunidad por medio de talleres comunitarios, o el allanamiento y represión a sus territorios? Como dije anteriormente, es un proceso complejo. El capitalismo de por sí no trajo riqueza y bienestar para todos. Por el contrario produce exclusión y segregación dirigidas a territorios y poblaciones específicas. Eso hay que desmontarlo.
Ignacio.
De los textos me ha quedado una inquietud acerca de cómo los nuevos pobres urbanos viven la “contaminación del lugar”. El texto de Bourgois presenta una etnografía interesante de cómo se construyen relaciones de dependencia, disciplina y dignidad alrededor del crack, pero poco deja ver sobre esa lógica de denigración lateral y distanciamiento mutuo que para Wacquant existe en los barrios con marginalidad avanzada. Ahora, con respecto a la “pérdida de un país interno” (como característica de dicha marginalidad) tengo otra inquietud. No sé si leer a Bourgois en clave de las críticas que dice Wacquant en cuanto a los simplismos y la disociación de la teoría que reinan recientemente en la etnografía urbana, o si, más bien, es una expresión de cómo las redes de trabajo y confianza alrededor de la venta de crack son comportamientos estratégicos con los que los nuevos pobres se repliegan en una economía ilegal de su colectividad de origen.
ResponderEliminarEl discurso de modernidad de las ciudades, trajo consigo una serie de procesos socio históricos y económicos que afectaron la visión utópica de un desarrollo a un mejor estado de porvenir y de bienestar igualitario, que en todo su afán perdió el punto de focalización repercutiendo en los grupos sociales que conforman la sociedad, acrecentando la racismo, las diferencias sociales, fenómenos migratorios, y tensiones de índole étnico.
ResponderEliminarLos procesos de una mala gestión del trabajo, de los cortos tiempos de contratación de los empleados, el trabajo asalariado ha generado una suerte de fragmentación y precariedad social, en la que se han acentuado prácticas de maltrato en las zonas de trabajo, y una constante rotación en los discursos sociales y políticos que se establece en el entramado social. Para ello el control gubernamental somete a sus ciudadanos, que mira como amenazantes en el sentido de las personas que se establezcan en las zonas de marginalidad, recalcando el sentido den territorios aislados, descalificando al sujeto y suprimiendo el contacto con los demás, enajenando el espacio y a los que lo habitan, es por eso que vale la pregunta de ¿es acaso la política protectora de los derechos de las personas o acaso un disfraz sobre el cual recaen procesos políticos, económicos y sociales que buscan la permanencia de un nivel segregativo de los habitantes de la ciudad? ¿Cuáles son los mecanismos sobre los cuales se fundamenta la práctica diaria de las comunidades marginadas de la ciudad?
La aglomeración de inmigrantes en zonas urbanas o barrios específicos no necesariamente significa la causa de la degradación sino más bien puede ser la consecuencia del déficit de infraestructuras, accesibilidad y equipamientos y abandono por parte del Estado que sufren ciertas zonas periféricas hablando en clave de ciudades andinas. La degradación de estos lugares se convierte en la oportunidad que tiene ciertos grupos de escasos para refugiarse. Me queda una inquietud acerca de los conceptos usados por Wacquant, ¿ se puede seguir usando los términos precariado, proletariado y marginalidad avanzada para referirnos a los mismo grupos sociales?, ¿ la marginalidad avanzada es característica de los grupos denominados precarios?, ¿ qué elementos son claves para entender una condición de marginalidad avanzada actualmente en nuestras ciudades?
ResponderEliminarSe me hace interesante la identificación que hace Buorgois sobre las diferentes formas en que se producen los contextos de marginalidad, como una relación directa de asimetría entre el mundo de la vida cotidiana y las políticas públicas que intervienen en ese escenario.
ResponderEliminar"La dificultad de vincular las acciones individuales y la econom ía política, sumada a la timidez personal y política de los etnógrafos estadounidenses a par-
tir de los años setenta, ha nublado nuestra comprensión de los mecanismos y
experiencias de la opresión." (Buorgois, 2010. P.48)
¿Cuál sería entonces el desafío de la etnografía en los contextos contemporáneos para que la labor antropológica supere el estadío de timidez política y pueda influir desde el contexto académico en la formulación de políticas públicas de manera que el Estado pueda superar también su posición de creador de marginalidad?
De la lectura crítica de Wacquant sobre el trabajo de sus predecesores (Duneier, Anderson y Newman) en Merodeando las calles… se pueden extraer una serie de lecciones sobre la forma en que podemos pensar nuestro trabajo de investigación desde las Ciencias Sociales: Hay que tener cuidado en romantizar nuestro tema y sujetos de estudio (parece sencillo y obvio, pero en el momento en que uno establece vínculos de humano a humano, la teoría se desdibuja muy discretamente). No asumir que por tener una ética estricta de trabajo, nuestro análisis será infalible “la prodigalidad moral no es garantía de un análisis social riguroso, y mucho menos su sustituto.” (P.10) (como decía mi abuela, de buenas intenciones está plagado el camino al infierno).
ResponderEliminarLas ciencias sociales no son activismo y viceversa. Es importante clarificar, hacia afuera y hacia adentro, desde qué lugar uno se está parando. El trabajo del antropólogo o sociólogo es comprender, no juzgar ni movilizar la moral o empatía de la sociedad hacia los vulnerables. Sin embargo, si este trabajo es meticuloso, agudo y crítico, y logra “escudriñar los mecanismos y significados sociales que gobiernan sus prácticas, dan fundamento a su moral (si de eso se tratase) y explican sus estrategias y vericuetos, tal como habría de hacerse respecto de cualquier categoría social” (P.10) puede generar efectos trascendentales.
También hay que tener una mirada (auto) crítica con respecto de la comunidad donde producimos, la academia: ojo con caer en el populismo académico, con omitir elementos o enfoques que luego resulten impopulares en la tendencia presente en la que nos movemos. No temer ser incómodos a los poderes (privados o públicos), aunque sean los que financian las investigaciones. Estar atentos a las auto sancadillas, mirarse autocríticamente para hacer un trabajo ético pero sin caer en moralismos, o en lugares comunes; retar nuestro sentido común, y ser honestos con nosotros mismos sobre si estamos trabajando para calzar en las economías de las publicaciones del mundo académico (con sus propias lógicas de poder).
Finalmente, no ser autocomplacientes con nuestro trabajo, teniendo cuidado de no caer en el espejismo de los estudios pretendidamente críticos que, al final del día pueden resultar siendo funcionales al sistema que pretenden develar.
Resultan valiosas las abstracciones o tipos ideales hechos por Wacquant, sobre su propuesta de marginalidad avanzada; cómo busca mediante éstos entender los procesos específicos que se están dando en estos espacios en la actualidad. En gran parte debido a la trasformación de los modos de empleo, el movimiento de las industrias a otras locaciones, la desigualdad social, la tercerización etc. Pero a su vez resulta interesante cómo aborda el tema entendiendo que las trasformaciones que se dan en este espacio están atravesadas por dos concepciones distintas, la una es cómo ha cambiado la forma en que los de afuera ven e imaginan este espacio; del mismo modo se va trasformando la percepción de los habitantes de este espacio y la concepción de gueto que brindaba cierto resguardo y afirmación de una identidad específica a sus habitantes va perdiendo su fuerza.
ResponderEliminarPor otro lado, me parece fundamental el papel de quienes nos dedicamos a las ciencias sociales para develar y visibilizar las distintas realidades, con el fin de una mejor comprensión de la ciudad y sus habitantes, por lo que coincido con el autor en que un respaldo teórico puede generar un mejor acercamiento a comprender las realidades específicas, compararlas y brindar una mirada lo menos idealista posible, sin olvidar la subjetividad que siempre está presente.
De los textos de Wacquant, generan interés para el debate dos aspectos: 1) los elementos propias de la investigación que el autor crítica de los trabajos estadounidenses en sociología (y aparentenemente en todo su aparataje universitario), que deben llevarnos a cuestionar el tipo de relación que sostenemos con nuestros intereses investigativos, un poco buscando contrarestar la influencia de romanticismos o miradas fundadas en aspectos valorativos y morales en la investigación. 2) Llama la atención de la reflexión sobre la marginalidad avanzada su marcada relación con formas flexibles de acumulación del capital, vinculadas e intensificadas por el giro neoliberal; en este aspecto cabe muy bien preguntarse, en la misma línea de mirar ambos lados del atlántico, por las formas de marginalidad avanzada latinoamericanas, donde nunca hubo un estado de bienestar y la flexibilización del trabajo tomó otras formas al igual que lo urbano: la migración en nuestros contextos toma formas distintas, no ya en una mirada poscolonial de Europa, pero tampoco completamente como hiperguetos, pues lo étnico tiene formas diferentes. Las diversas formas de conflictos internos (Perú y Colombia, son algunos ejemplos) pueden mostrar quizá algunas de las especificidades en las formaciones nacionales-locales de esas marginalidades avanzadas en nuestros contextos ¿Qué otras formas le caracterizarían?
ResponderEliminarEl primer objetivo de la investigación de Bourgois es de producir una etnografía que logre exorcizar la estigmatización que se produce en las etnografías urbanas de la marginalidad.
ResponderEliminarSin embargo el resultado es una análisis, nuda y cruda, de la sociedad en la “Inner City”, no para caer en el estigma del “gueto” sino para mostrar y describir las dinámicas de una economía sub-alterna y las realidades sociales en estricta conexión con droga y violencia, como hechos de sobrevivencia y de auto-determinación en termino de justicia y dominio sobre el territorio, en estos barrios que el Estado del Bienestar abandona completamente, en términos de orden, control y infraestructuras. De hecho el arriesgo, como enuncia Wacquant citando Weber es que al querer «ordinar analíticamente la realidad empírica» se caiga en una mitificación y , en consecuencia, una reformación del estigma. Como, del otro lado se puede generar una “otra lógica de categorización binaria”; donde el individuo, o grupo social, marginal se quiere mostrar como una figura “heroica” en contrasto y afuera del orden y de la decencia dictados por las reglas de las metrópolis modernas. Aunque como podemos analizar, confrontando diferentes autores que tratan el mismo tema de marginalidad, estos grupos sociales tienen matrices comunes pero dinámicas muy diferentes según el contexto urbano en el que se generan.
Como hilo conductor, encontramos el espacio urbano, generador y receptor de estas realidades sociales complejas y muy distintas, pero con matrices semejantes.
En este tema de “abandono” del Estado, y de desarrollo de polos de la marginalidad, me surge una pregunta que en el texto de Bourgois, así como en el de Wacquant, pasando por la “violencia en los márgenes” de Ayuero y Berti, se me hace siempre mas presente ¿Nos encontramos frente a una estrategia? ¿El estado necesita estos núcleos? Concentrados espacialmente, en “marginalidades avanzadas” dada por la conformación y organización de las metrópolis donde mandan urbanizaciones dictadas por el modelo neoliberal, para poder manejar un control sobre un espacio aparentemente “indecente” y “ilegal” con respecto a las conductas de la Metrópolis, pero que finalmente ocupa roles sociales útiles y necesarios a la misma Metrópolis?
En el texto de Wacquant ´´Los condenados de la ciudad´´ este autor realiza un análisis etnográfico de los problemas de la urbe en el siglo XXI en relación a la marginalidad y a los sujetos que son clasificados como ´´marginales´´ que viven en los guetos de la ciudad, me surge una pregunta sobre este tema y es ¿Cómo realizar una etnografía en los barrios marginales de la ciudad?Si bien el autor aborda este tema pensando en las grandes ciudades de Europa y Estados Unidos, esto permite pensar también en la realidad de América Latina y el problema de las grandes ciudades en relación a los barrios marginales y a las dinámicas que se desarrollan en esos contextos; pese a que la palabra ´´marginal´´ está cargado de un fuerte estigma social, lleno de prejuicios y rechazo por parte de la población y del Estado, creo que así como nos invita Wacquant a pensar en estos sujetos, es importante desde la antropología poder hacer un análisis de estos sujetos en nuestra ciudad, conocer quiénes son esos individuos que están marcados por un determinado sector en el que viven, conocer su historia de vida, su contexto familiar, y su rol en la sociedad; esto me lleva a pensar que lo marginal tiene una relación directa con ciertas formas de explotación que están presentes aún en la actualidad; como la explotación laboral ,la falta de empleo, la violencia tanto en el sistema familiar; como en el barrio , que se convierte en una dinámica del lugar y que va marcando la vida de los individuos. Otro punto importante es la mirada que se tiene sobre la ciudad entendida desde la idea de barrios, cada uno de estos sectores va a moldear a la ciudad de una manera diferente. Y cada persona puede construir una parte de su sentido de pertenencia según el sector de la ciudad donde habita; me sorprende que tal como menciona el autor para algunas personas el vivir en un sector marginal provoca vergüenza y la persona busca la manera de evitar que sus amigos o conocidos conozcan su casa por temor a ser juzgado; este mismo fenómenos lo podemos estudiar en la ciudad de Quito, donde el tema de vivir en el sur o en el norte está marcado de fuertes imaginarios sociales vinculados al tema de clase social y quizá para algunos sujetos puede ser difícil hablar del barrio donde vive.
ResponderEliminarLa conformación de una ciudad se ve influenciado por el sistema económico, social y cultural que se implanta en ella. Es así que en las sociedades occidentalizadas los problemas relacionados con la exclusión pobreza y desigualdad, producto de la globalización, han contribuido a la concentración de múltiples problemas en espacios urbanos y con ello la estigmatización, segregación y marginalización de los habitantes de un determinado lugar.
ResponderEliminarEn este sentido, todos los habitantes de estos barrios son relacionados con la delincuencia, pandillas y otros tipos de delitos presentes en estos espacios, lo que produce que estos grupos terminen aislados en estos barrios, lo que Wacquant considera como “alienación espacial y la disolución del lugar”. Así mismo, debido a los conflictos sociales que se presentan, estos espacios terminan convirtiéndose en “territorios de guerra” tanto para la sociedad como para las autoridades.
Las lecturas ponen en primer plano las nuevas formas de desigualdad y marginalidad urbana en sociedades avanzadas. En general, la reestructuración global del capitalismo; y en específico, una nueva división de trabajo, economía acelerada, diversificación de las industrias convergen en un (re)brote de la indigencia y precarizacion en los centros poblacionales. Lo que llama mi atención es el especial cuidado en acompañar a la lectura del paso de un sociedad fordista a una postfordista, del enclasamiento de este fenómeno especificas zonas de la ciudad.
ResponderEliminarHago énfasis en la transformación del mundo del trabajo, en la se experimenta el progresivo declive de las formas sindicales, la eliminación de trabajos semicalificados, y la flexibilización de las condiciones básicas del empleo. Esto acompaña una lectura de la crisis del estado de bienestar -que debe ser entendida como un arreglo funcional a la reproducción de régimen de acumulación antes q una visión utópica.
Siguiendo el argumento, hay un excedente de mano de obra, por la mutación del trabajo industria,l que tienen una distribución y localización en el plano socioespacial. Este fenómeno no es indiferenciado, adquiere sus matices de acuerdo a cada contexto, pero comparten un rasgo común: hay una cercanía social que promueve con mayor fuerza procesos de segregación, estigmatizacion y diferenciación social.
Un ejemplo de con repercusiones políticas de la marginalidad de barrios se presenta en Francia, en zonas industriales muy antiguas que no sobrevivieron el proceso de deslocalizacion productiva (Metz, Nancy, Dijon). Son espacios obreros y socialistas en los que tiene cabida un discurso nacionalista y proteccionista (Le Pen) que se extiende por el resto de Europa: un voto obrero, jubilado y desempleado.
Alberto
El texto de Bourgois es un buen ejemplo de una etnografía urbana, dejando de lado la noción de un estudio de sociedades primitivas de las que partía la antropología clásica, además de retratar las relaciones dentro de un barrio en una gran ciudad. En la descripción del autor destaca aspectos en torno a las normas culturales de respeto mutuo, dentro del negocio de las drogas en Nueva York, donde destaca “la sobrevivencia del más fuerte” en el que intervienen categorías clave dentro de la antropología como el parentesco o el machismo que permite adquirir ciertos privilegios, de acuerdo a la descripción se puede hablar de una cultura de la violencia o normalización de esta además hace uso del terror que permea la vida cotidiana, de esta forma pienso en la dificultad obtener datos en contextos violentos, como el narcotráfico, ¿Cómo se puede hacer trabajo de campo sobre estos temas?
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